Cuando era niño, siempre
escuchaba a mis padres hablar con otras personas acerca de la importancia de
contar con una carrera universitaria que permitiera obtener un trabajo digno en
esa época. El argumento que ellos tenían, era que el hecho de contar con un
título profesional, garantizaba que aquella persona encontraría rápidamente un
buen trabajo en el cual se desempeñaría toda su vida.
Han pasado ya algunos
años, y después de haber escuchado esas platicas, me doy cuenta que ya no basta
solamente con tener un título universitario para poder encontrar un buen
trabajo. Actualmente, para figurar en el mapa de las grandes empresas y corporaciones
nacionales e internacionales, hay que contar con una especialidad, con una
maestría o con un doctorado. Aquella persona que desee entrar a estas empresas
solamente con una licenciatura o ingeniería, será porque tiene entre
muchas otras habilidades, la capacidad de hablar no solamente su idioma natal y
el inglés sino que además, uno extra que le permita diferenciarse con respecto
a los demás.
Sir Ken Robinson
distinguido conferenciante británico, en varias de sus
exposiciones, trata de explicar lo anterior como consecuencia de algo que él
denomina como: “inflación
educativa”. Es decir, actualmente para acceder a los puestos que nuestros
abuelos e incluso nuestros padres obtenían solamente con un título
universitario (licenciatura o ingeniería), ahora es necesario tener un
grado de maestría y para casos más extremos doctorados. Al haber cada día más
competencia y jóvenes cada vez más preparados, pareciera suponer que dentro de
una o dos décadas, incluso los trabajos más “sencillos” y menos “complicados”
tendrán que ser desempeñados por aquellos que tengan el titulo de doctores.
La inflación educativa
consiste en eso, en que con el paso de los años y con el paso de las
generaciones, el nivel de estudios de las personas debido a la oferta educativa
cada vez mas amplia, irá perdiendo valor haciendo que incluso en el futuro, un
doctorado sea lo mas común entre las personas.
Dicho lo anterior,
¿Realmente contar con un título universitario, un grado de maestría o de
doctorado, demuestra la capacidad intelectual y conocimiento que tienen las
personas, o solo es una base estándar para poderlos agrupar y
diferenciar?